Nos encantó Cerdeña, es una isla muy natural y el paisaje, por suerte, no muestra la masificación turística de otras islas mediterráneas. Nos hemos quedado con ganas de haber estado al menos 10 días porque se nos hizo muy corto el viaje al movernos tanto.
Los alojamientos nos gustaron mucho, especialmente el Stazzo Lu Ciaccaru, a pesar de ser más caro.
Del Vigneti nos gustó mucho lo naturales que son sus productos (mermeladas caseras, miel casera, bizcochos caseros) y lo amables que fueron las personas que nos atendieron dispuestas a contestar a nuestras preguntas y que nos facilitaron un mapa e indicaciones al llegar, sin tener que pedirlo. Además el día de llegada nos retrasamos porque me perdieron la maleta, les mandamos un sms y nos contestaron ofreciéndonos ayuda, luego al llegar, aunque habían cerrado la cocina nos dieron algo de comer frío y nos lo trajeron hasta la habitación (10 puntos). Aunque no es tan lujoso como el Lu Ciaccaru todo está muy limpio y agradable y hay muchos animales en los campos adyacentes a la casa (que gustan especialmente a los niños, porque a nosotros los pájaros nos despertaban muy temprano todas las mañanas). La piscina también muy bien. Lo que menos nos gustó es que la carretera de acceso (desde la carretera principal) está llena de baches y sin asfaltar y el coche de alquiler sufrió bastante, porque lleva unos 10 minutos llegar desde la casa a la carretera asfaltada. Las coordenadas perfectas y el tomtom nos llevó hasta la puerta (y menos mal, porque llegamos por la noche y no habríamos sido capaces de llegar sin el GPS a oscuras).
En el Stazzo Lu Ciaccaru los productos son menos naturales pero el paisaje, el silencio y la piscina son espectaculares. Además la suite era muy amplia y bonita. El acceso por carretera es más rápido y sencillo. Un día cenamos allí y aunque estuvo bien, nos pareció demasiado caro para cenar.
Las playas, a pesar de ser junio, estaban a tope, sobre todo por la zona de Alghero por lo que de domingo a martes no disfrutamos tanto como jueves y viernes. Fuimos a las siguientes playas: La Speranza camino de Bosa el domingo, La Pelosa y Les Salines el lunes, a Le Bombarde el martes, Badesi Mare el miércoles, cala zona Liscia Ruia (Cala di Volpe) el jueves, cala zona Baia Sardinia cerca de Li Mucchj Bianchi el viernes. Nuestra impresión es que hacia Costa Paradiso encontramos playas más extensas y menos concurridas como Badesi Mare y que en la zona de Costa Esmeralda se pueden descubrir unas calas fantásticas y con poca gente (andando unos cuantos metros/km) desde donde dejábamos el coche y adentrándose cuando se descubre un camino en la maleza.
En cuanto a los pueblos cercanos a los alojamientos:
- Alghero nos gustó mucho y para estar varios días es, de todos los sitios al que fuimos, el más grande y que ofrece más distracciones y servicios. Cenamos en Il Pesce d'oro y nos gustó mucho.
- Arzachena estaba "casi desierto" y el restaurante La Vecchia Arzachena cerrado a cal y canto (y no sé si volverá a abrir), no era lunes y todo lo demás estaba abierto. Cenamos en La Terraza pero nosotros no lo recomendaríamos, tiene mucha gente pero nos gustó (es un restaurante como de centro comercial y la calidad del producto no se puede comparar con otros sitios a los que fuimos).
- Descubrimos que Cannigione tiene mucho más ambiente que Arzachena y también está muy cerca del Stazzo, por lo que lo recomendaríamos para ir a cenar en vez de Arzachena. Nosotros cenamos en La Zattera (Via Nazionale, 86 - Tel. 0789 8828) y el pescado estaba fresco y muy rico. Luego paseamos por la zona del puerto y había una feria de artesanía y bastante ambiente, era viernes.
Nuestra recomendación para otros viajeros: llevar siempre al menos 150 euros de dinero efectivo al día encima por pareja, porque apenas se puede usar la tarjeta de crédito para nada. Por culpa de no llevar dinero suficiente, por haberlo gastado en comer o no haber recordado sacarlo del cajero, no entramos en la cueva de Neptuno ni pudimos coger en Palau una excursión hacia el archipiélago de la Magdalena. Tendremos que volver...
Bueno, muchas gracias por todo. Seguramente contactemos con vosotros de nuevo para volver a Cerdeña o descubrir Sicilia.
Un abrazo,
Paula
Los alojamientos nos gustaron mucho, especialmente el Stazzo Lu Ciaccaru, a pesar de ser más caro.
Del Vigneti nos gustó mucho lo naturales que son sus productos (mermeladas caseras, miel casera, bizcochos caseros) y lo amables que fueron las personas que nos atendieron dispuestas a contestar a nuestras preguntas y que nos facilitaron un mapa e indicaciones al llegar, sin tener que pedirlo. Además el día de llegada nos retrasamos porque me perdieron la maleta, les mandamos un sms y nos contestaron ofreciéndonos ayuda, luego al llegar, aunque habían cerrado la cocina nos dieron algo de comer frío y nos lo trajeron hasta la habitación (10 puntos). Aunque no es tan lujoso como el Lu Ciaccaru todo está muy limpio y agradable y hay muchos animales en los campos adyacentes a la casa (que gustan especialmente a los niños, porque a nosotros los pájaros nos despertaban muy temprano todas las mañanas). La piscina también muy bien. Lo que menos nos gustó es que la carretera de acceso (desde la carretera principal) está llena de baches y sin asfaltar y el coche de alquiler sufrió bastante, porque lleva unos 10 minutos llegar desde la casa a la carretera asfaltada. Las coordenadas perfectas y el tomtom nos llevó hasta la puerta (y menos mal, porque llegamos por la noche y no habríamos sido capaces de llegar sin el GPS a oscuras).
En el Stazzo Lu Ciaccaru los productos son menos naturales pero el paisaje, el silencio y la piscina son espectaculares. Además la suite era muy amplia y bonita. El acceso por carretera es más rápido y sencillo. Un día cenamos allí y aunque estuvo bien, nos pareció demasiado caro para cenar.
Las playas, a pesar de ser junio, estaban a tope, sobre todo por la zona de Alghero por lo que de domingo a martes no disfrutamos tanto como jueves y viernes. Fuimos a las siguientes playas: La Speranza camino de Bosa el domingo, La Pelosa y Les Salines el lunes, a Le Bombarde el martes, Badesi Mare el miércoles, cala zona Liscia Ruia (Cala di Volpe) el jueves, cala zona Baia Sardinia cerca de Li Mucchj Bianchi el viernes. Nuestra impresión es que hacia Costa Paradiso encontramos playas más extensas y menos concurridas como Badesi Mare y que en la zona de Costa Esmeralda se pueden descubrir unas calas fantásticas y con poca gente (andando unos cuantos metros/km) desde donde dejábamos el coche y adentrándose cuando se descubre un camino en la maleza.
En cuanto a los pueblos cercanos a los alojamientos:
- Alghero nos gustó mucho y para estar varios días es, de todos los sitios al que fuimos, el más grande y que ofrece más distracciones y servicios. Cenamos en Il Pesce d'oro y nos gustó mucho.
- Arzachena estaba "casi desierto" y el restaurante La Vecchia Arzachena cerrado a cal y canto (y no sé si volverá a abrir), no era lunes y todo lo demás estaba abierto. Cenamos en La Terraza pero nosotros no lo recomendaríamos, tiene mucha gente pero nos gustó (es un restaurante como de centro comercial y la calidad del producto no se puede comparar con otros sitios a los que fuimos).
- Descubrimos que Cannigione tiene mucho más ambiente que Arzachena y también está muy cerca del Stazzo, por lo que lo recomendaríamos para ir a cenar en vez de Arzachena. Nosotros cenamos en La Zattera (Via Nazionale, 86 - Tel. 0789 8828) y el pescado estaba fresco y muy rico. Luego paseamos por la zona del puerto y había una feria de artesanía y bastante ambiente, era viernes.
Nuestra recomendación para otros viajeros: llevar siempre al menos 150 euros de dinero efectivo al día encima por pareja, porque apenas se puede usar la tarjeta de crédito para nada. Por culpa de no llevar dinero suficiente, por haberlo gastado en comer o no haber recordado sacarlo del cajero, no entramos en la cueva de Neptuno ni pudimos coger en Palau una excursión hacia el archipiélago de la Magdalena. Tendremos que volver...
Bueno, muchas gracias por todo. Seguramente contactemos con vosotros de nuevo para volver a Cerdeña o descubrir Sicilia.
Un abrazo,
Paula
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