TODAS LAS ENTRADAS DEL BLOG DE CERDEÑA +

miércoles, 28 de noviembre de 2012

Sulcis-Iglesiente, la Cerdeña que no te esperas

Sulcis Iglesiente es todavía la parte más desconocida de la isla de Cerdeña pero sin duda la más sorprendente. Cuando se habla de Cerdeña aún la mayoría la asocia -lamentablemente- solo a la costa smeralda sin saber que la verdadera Cerdeña no está allí sino en zonas como esta. Si nunca has estado en Cerdeña, Sulcis Iglesiente te dará más de una excusa para descubrirla!
Se trata exactamente de la parte sureste de Cerdeña e incluye las islas de Sant'Antioco y Carloforte. Desde Portixeddu hasta Porto Pino encontrarás playas espectaculares y aún vírgenes, arboles de corcho doblados por el viento, senderos de cultura y paisajes increíbles. Un verdadero espectáculo de la naturaleza.  
Y si te gusta conducir, a lo largo de la carretera 126, un panorama extraordinario se te abrirá de repente: el Pan di Zucchero, una roca calcárea que, junto con otros peñones, es cuanto de más parecido a los 12 apóstoles australianos (aunque en pequeño vamos!)...
Entre las playas más bonitas anotamos Cala Domestica, Portixeddu, Portopaglietto, Masua, Porto Pino, Porto Pineddu y muchas calas de Sant'Antioco y Carloforte. Si pero te interesa la cultura y la arqueología, entonces el Sulcis es el destino ideal para el viajero en busca de la autenticidad del lugar, de los detalles todavía inalterados, al que le gusta también vivir su destino a través del diálogo y el conocimiento de la gente que lo anima. Aconsejamos visitar el Templo de Antas, el Monte Sirai, el poblado hipogeo de Sant'Antioco y la necropolis de Montessu. Pero quizás sean las minas lo que más te sorprenderá. 
 Cerdeña es el primer parque geominero del mundo reconocido por la UNESCO. Las distintas minas del Sulcis Iglesiente representan hoy un importante ejemplo de arqueología industrial y se han trasformado en centros de difusión cultural. 
 En Iglesias se puede revivir intensamente la experiencia de la mina visitando sus imponentes restos: las visitas guidas se desarrollan acompañadas precisamente por antiguos mineros que trabajaron aquí y que cuentan por propia experiencia la historia, la dureza y la vida cotidiana en las minas. La Galería Henry, la estructura más imponente de la mina, se yergue extraordinariamente sobre el dorso de un acantilado a plomo sobre el mar, a través de pequeñas galerías y caminos esculpidos en la roca. 
Para los amantes del senderismo y de la arqueología industrial es muy aconsejable la Lavería Lamarmora, construida de piedra vista, inmersa en el verde y frente al mar. A los pies de la Lavería, un pequeño atraque usado para la carga del mineral puede emplearse como trampolín para una zambullida refrescante en las aguas do color esmeralda. Por último Porto Flavia, cerca de Masua, que representa un brillante e innovador ejemplo de ingeniería. Realizado en el 1924, excavando en la montaña unos seiscientos metros, se puede admirar el complejo sistema de galerías superpuestas donde una cinta transportadora recibía el mineral de los depósitos ara trasladarlos directamente a la bodega de los barcos de carga. 
Entre las dos islas me quedo con Carloforte (ndr). Esta pequeña isla un tiempo colonia de los genoveses (de hecho aquí hoy en día aún se habla un dialecto genovés), es tan pequeña cuanto preciosa y rica en recursos. En una visita en día habría que elegir entre las cosas que se quieren ver o hacer. El pueblo es muy gracioso y es un placer dar un paseo por sus callejuelas que suben hasta el castillo y luego bajan hacía el mar ofreciendo unas vistas muy bonitas. Pero tal vez se puede empezar la visita por las salinas con sus flamencos o bajar hacia el sur para ver "le colonne", dos curiosas columnas de roca en el mar, la "tonnara" (el establecimiento para la pesca del atún), o simplemente tomar el sol en una de sus maravillosas calas...
Concluimos nuestro viaje con Carbonia y la cueva de Su Mannau. Carbonia, que alberga también el museo del carbón, es un pueblo que fue construido en tan solo 3 meses para satisfacer las necesidades de los mineros de la zona. Contestando el decorativismo y con el deseo de realizar espacios funcionales, la estructura de Carbonia representa una de las etapas más innovadoras e inquietas de la arquitectura italiana, conocida como racionalista.
Desde el punto de vista geológico, Sulcis Iglesiente es la tierra más antiguas de Italia y una de las pocas en Europa que contenga todas las épocas geológicas en un espacio limitado. Dentro de las grutas se ha desarrollado una fauna muy rica que se ha adaptado al medio particular. Su Mannau es la más interesante...


Fuente: www.sulcisiglesiente.eu